Parte uno - Delimitación del contexto. Pensaba en los Dynamite, quizás después de todo no son un grupo tan malo. Tienen su “onda” como todos los grupos de estos días. Un reseñista en “Sónika” hace parecer importante la actitud en el escenario de los Quiero club como parte integral del concepto. Probablemente el periodista ignora que esa actitud no se puede percibir del todo en un disco. En fin. Volviendo a los Dynamite, pensaba que sí uno creyera que los proyectos musicales fueran comidas los Dynamite serían como una buena quesadilla; ya saben, ponedora, sabrosona, pa´ pasar el rato, matar el ansía; pero no más. Las quesadillas difícilmente son plato gourmet, y la misma regla aplica al fase-food de su ubicación geográfica favorita. Hamburguesas, hot-dogs, fish & chips, pambazos, “Dominós Pizza”, tacos, french fries. Piense usted entonces que la escena “rockera” actual, es como un tianguis donde se le ofrecen al por mayor estas posibilidades de comidas rápidas, cuya función es medi